martes, 16 de septiembre de 2014

Juego de Tronos una relación de amor y sangre.

Desde niña he adorado el género de fantasía tanto en películas, series o libros y lo más importante para los de mi alrededor era no confundirlo con la ciencia-ficción, que también me gusta pero no tanto y NO es lo mismo. 

Como a la mayoría de la gente de mi generación la historia que marcó mi infancia y adolescencia fue Harry Potter y ese fue el libro de fantasía que posicionó ese género para siempre ese género en lo alto del podio. Antes y después ha habido otros libros, series y películas (La historia interminable, El señor de los anillos, True Blood) pero todos ellos andan bajo el reinado de la historia del joven mago. 

En el fascinantes (y amado) mundo de las series veo varias que pertenecen a este género (en especial porque las agrupan con las de Sci-fi por mucho que yo repita que no es lo mismo) entre ellas están True Blood (ya mencionada), Crónicas Vampíricas, Buffy, Embrujadas, El círculo secreto, Once upon a time... y la lista podría no tener fin (y no exagero) pero sí tenía que decidirme por una para acercaros a mi maravilloso mundo de las series de fantasía esa tenía que ser la "it-serie" del momento: Juego de Tronos.

Poster Game of Thrones. Fuente: Flickr
Al principio no tenía muy claro como definir mi relación con Juego de Tronos, no tenía muy claro porque había elegido esa serie entre todas las que veo (que son más de las que imaginais) pero decidí fiarme de mi instinto a la hora de escoger primero y después pensar. 

Si hay una frase que pueda definir mi relación (y prácticamente la de cualquiera que vea la serie) es la famosa declaración de Logan Echols a Verónica en Verónica Mars: "Nuestra historia de amor es épica, abarcando años y continentes, dejando vidas arruinadas y baños de sangre". Esta frase bien podría resumir la trama de la serie de HBO. Todo fan de la creación de David Benioff y Daniel B. Weiss sigue amando la serie por mucho que G.R.R Martin se empeñe en eliminar todos los personajes que te caen bien. 

Cuando empecé la serie ya se habían emitido las tres primeras temporadas (exacto ya había sido La Boda Roja) pero en un verano me puse al día y después tuve una larga espera hasta abril cuando por fin emitieron la cuarta temporada. Sin embargo, mi mente ansiosa de conocer más sobre Poniente y sus belicosos habitantes me introduje en el mundo de Canción de hielo y fuego, los libros en los que está basada esta maravillosa serie. 

Cuando llegué a Tormenta de espadas (el tercero de la saga) poco a poco fui alcanzando el ritmo de la serie y comenzó mi gran duda ¿qué llevar antes los libros o la serie? Pocas veces después de esta pregunta he tomado esta decisión pero Juego de Tronos tiene el honor de ser la primera serie que hizo que no avanzara con los libros para no leer spoilers.

Se que sería incapaz de decir que Juego de Tronos es mi serie favorita (tal vez porque no podría decirlo de ninguna) pero no dudo que sea una de ellas por que sí que puedo afirmar que es una serie única. 


Source: bliiis

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